El viento que ha volcado las sillas agita violentamente los delgados troncos de los hibiscos de la terraza. Si reinara la oscuridad hablaría de tormentas y miedos, pero el sol brilla en un cielo del mismo azul que el que utilizan los niños pequeños en sus dibujos.
sábado, 30 de marzo de 2013
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6 comentarios:
El sol siempre sigue ahí. Incluso detrás de las nubes más negras.
Me encanta ver que estás de vuelta...
Lo mismo digo.
Un abrazo
¡Eso! Un abrazo
Muchas gracias a todos. Vuelvo a escribir.
¡Qué alegría!
La mía de veros por aquí.
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