lunes, 18 de noviembre de 2013

Mamparas

A partir de cierto momento uno comienza a sentir los dedos de los muertos alrededor de los tobillos bajo las olas gigantescas en la oscuridad de la noche antártica. La fragilidad de las mamparas. La sólida realidad del mundo en este lado.

4 comentarios:

giovanni dijo...

Como siempre, tu última frase dice mucho, pero gracias a lo que precedió.

NáN dijo...

No somos nadie.

taliesin dijo...

Entiendo que hablar de la solidez de este mundo tiene la intención de igualarlo en "realidad" al otro mundo consensuado.

Sin embargo, tengo para mí que en este mundo de los muertos, oscuro y frío, lo que acontece es un proceso de desolidificación del otro consensuado. Lo cual es una gran noticia!
Un saludo

Jesús Miramón dijo...

Un saludo, taliesin, bienvenido al cabo de hornos.

Giovanni, Nán, un abrazo.