El verano avanza a quince centímetros por hora. Debo recordar que ninguno de estos minutos míos, ninguna de estas horas ni estos días míos deberían ser tiempo muerto, aunque tan a menudo lo parezcan.
A veces, al caer la tarde, estallan violentas y tímidas y breves tormentas de gotas de agua tan gruesas que al golpear el suelo se transforman automáticamente en respuestas.
domingo, 4 de agosto de 2013
Violentas y tímidas y breves
Publicado por Jesús Miramón a las 0:50
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2 comentarios:
Pues me gustan esas respuestas , enhorabuena por tu blog.
Un beso.
Muchas gracias.
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